miércoles, 19 de mayo de 2010

DOÑA ANA MANUELA PAZ DE PULIDO. INSIGNE EDUCADORA TACHIRENSE, MAESTRA DE MAESTROS

Por: José Lubin Pulido Chaparro


Ana Manuela Paz de Pulido
la maestra eterna de San José de Bolívar

Nativa de La Grita, llega en el año de 1930 a nuestro pequeño poblado de San José de Bolívar, para iniciarse de maestra en la escuela rural de Mesa de San Antonio que apenas comenzaba. La primera escuela rural que se funda en la aldea mas consentida de este Municipio.
Era una joven y apuesta señorita con escasos 17 años, había transcurrido poco tiempo de culminar la primaria, de finos modales, sus rasgos demarcaban una adolescente de carácter recio, sin embargo se reflejaba en ella la nobleza que caracteriza a la mujer tachirense. 
Nació en 1913, en la Atenas del Táchira, sus padres: Don Ramón Paz Toro y doña Clotilde Sánchez Urbina de Paz, dieron cuenta de su inteligencia y de sus dotes que de niña manifestó por la enseñanza, soñaba con ser educadora; a edad temprana la colocan en la escuela destacándose de tal manera que sorprende a sus maestros. 
En la actualidad con sus 94 años, recuerda con memoria asombrosa que su maestra insigne, la señorita: Ana Francisca Sánchez, de sobrado carácter, pero noble, excelente educadora, muy instruida y educada, quien era oriunda de Bogota; plasmó en su joven alumna quizá su sucesora.
La escuela funciona en la casa de don Leandro Peñalosa, quien era uno de los promotores que con otros pobladores viajaron a La Grita tratando de conseguir la ansiada escuela. Esa bella joven, llamaba la atención de los jóvenes de la época, quienes volcaban la mirada a tan distinguida dama. Don Leandro, a quien Doña Manuela recuerda con afecto, en todo momento estaba pendiente e incluso de noche la cuidaba de quienes pudiesen acosarla.
De esos primeros alumnos recuerda a José Eutimio Peñalosa, un muchacho muy inteligente, se fue con los Hermanos de La Salle, se gradúa de licenciado en Educación, destacándose como Historiador y Escritor.
Después de dos años, en la escuela rural, pasa al poblado para ejercer de maestra en la Escuela Concentrada 87, que así la recuerda.
Conoció al joven Víctor Manuel Pulido Vivas de quien refiere: su nobleza, su inteligencia y su educación, bastaron para unirse en matrimonio, por demás ejemplar lleno de virtudes ciudadanas; en un ambiente religioso y de sanas costumbres que se prolongó por toda la vida. A su esposo lo recuerda con admiración, era un hombre muy educado, educación que heredó de su padres: Don Juan Pulido Zambrano y de doña Asunción Vivas Chaparro. Don Víctor: es bregador, excelente administrador de sus escasos recursos y amantísimo padre y connotado esposo.
En su casa moraron sacerdotes que en la época venían en busca de jóvenes, promesa para el sacerdocio. Eran padres Agustinos Recoletos, de origen español que vinieron de Caracas, entre otros, los presbíteros: Serafín Prado de quien recuerda como excelente orador, Carmelo Lerga y Pedro Senocedrian y en especial al padre Domingo Guerrero párroco de Queniquea y San José de Bolívar.
Amigos de la casa, sobre todo de Víctor; fue el doctor Bruno Baldassini, el primer medico oficial que llegó a San José de Bolívar.
Al fundarse la Escuela Federal Regina de Velásquez, es nombrada Directora, cargo que ejerce hasta 1963 cuando es jubilada.
Cuando se refería a los niños del campo, Doña Manuela opinaba que tenía que brindárseles atención púes en ellos estaba el futuro, "son niños con sobrada inteligencia, el mundo esta lleno de ejemplos, son muchos los hombres y mujeres que han triunfado en la vida y su origen es campesino".
No le gusta que a un niño se le dijese bruto; en una oportunidad, una maestra le trató de bruto a un niño y ella la reprimió, diciéndole que no había niños brutos, que todo niño tiene inteligencia que se debe cultivar, e indagar al respecto, todo niño tiene una habilidad nata para algo útil.
La enseñanza que recibimos quienes estudiamos con ella fue sólida, muy completa. En matemáticas hacía hincapié en los decimales, los quebrados, la regla de tres simple y compuesta, el porcentaje, que eso era fundamental para nuestra vida; en castellano y literatura era muy estricta, sobremanera en ortografía y redacción; en geografía conocimos el mundo sin haber salido de este terruño. Supimos que San Marino era el país mas pequeño del mundo ubicado en Europa. Nos enseñó quienes fueron los inventores notables: Benjamín Franklin por ejemplo: quien bahía inventado el pararrayos y fue además redactor del acta de independencia de los Estados Unidos, nos decía. Referente a la historia de Venezuela la relataba de tal manera, que parecía que la vivíamos. Sentía y trasmitía el respeto y admiración por los héroes de la Independencia y los Símbolos Patrios.
Nos inculcó las normas de Carreño para la educación y el comportamiento humano.
Recuerda a sus exalumnos y se enorgullece de sus triunfos, por los que han sido educadores, tiene un respeto especial por; Juanita Pulido Vivas, sus escasos recursos no frenaron su vida, su inteligencia la llevó al triunfo, excelente pedagoga. Fundó el Pedagógico de Barquisimeto. Carmen Mora de Pulido, maestra destacada, la biblioteca de San Pablo lleva su nombre, Cira Pulido Francisconi, actuó muy bien de Directora en la Escuela Regina de Velásquez, "tengo entendido que Ana Custodia es una institutriz de renombre y en fin se me hace difícil enumerar a mis alumnos que son educadores, se que fueron muy buenos y eso me alegra, también para los demás profesionales y para aquellos que no pudieron continuar sus estudios, por alguna razón, todos ellos, estoy segura, han sido útiles a la patria y a la familia".
Siente un amor inmenso por San José de Bolívar, lo ama, lo defiende, esta pendiente de su desarrollo y de sus habitantes, de quienes sostiene: son gente noble, directa y espontánea, allí tuve buenas amistades.
El año pasado vino a este poblado, ella quería verlo antes de morir tan siquiera por última vez, estuvo en la iglesia, en el casco urbano y en el cementerio para rezar por los que habían muerto.